La Cámara de Barcelona ha pedido cerrar «lo antes posible» una alternativa a Great Wall Motors (GWM) para la reindustrialización de las plantas de Nissan en Barcelona, según un comunicado de este martes.
Entre las opciones que se están debatiendo está el ‘hub’ de electromovilidad, proyectos de empresas extranjeras como el de la australiana Goodman –que propone crear un espacio logístico– así como la propuesta de la empresa Punch, que produciría vehículos eléctricos.
La entidad considera que el grado de impacto económico definitivo que ocasionará el cierre dependerá del proyecto que se termine seleccionando, dada la importancia de garantizar la continuidad de los puestos de trabajo de Nissan y sus empresas proveedoras.
En cuanto a las empresas proveedoras en la provincia de Barcelona, la Cámara de Barcelona estima que el cierre afectará a cerca de 3.000 empleos, «que se suman a los 1.400 trabajadores directos de Nissan y a 20.000 indirectos que habría en riesgo».
Nissan ya ha cesado su actividad en las líneas de producción en Barcelona, mientras que se prevé que cerrará definitivamente las fábricas el 31 de diciembre, tras 42 años de actividad.